Cuando su marido lleva mesas que no la toca, ya tiene muchas ganas que le claven una verga y de acostumbré me pide mi verga. no se le puede decir no a una panocha desesperada
Despues de estar chatiando con mi ex sinaloense de guasave,. fui hasta tijuana a su casa a cojermela en el mero friaso en la mañana mientras su marido anda trabajando. me empezó a bailar mi verga de perrito como los viejos tiempos